*EN BUSCA DEL TESORO

En pleno siglo XXI pocos tesoros quedan por descubrir. Ahora se hace pública su ubicación, soportan la mirada de un sin fin de curiosos y enriquecen a todo aquel que se precie a estar junto a el.
Lo siento para el que después de haber leído estas líneas, se haya imaginado sus bolsillos llenos de monedas de oro, pues no es esta la recompensa de encontrar este tesoro. No hablo de premios tangibles, aunque me refiero a más de 3.000 piezas procedentes de lugares de Latinoamérica como México, Costa Rica, Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia. Objetos que por primera vez se muestran al público en la exposición “Y las obras se hicieron tesoros”. Obras que recogen más de cincuenta siglos de cultura y que hoy se muestran en la Sala A del Centro de Arte Tomás y Valiente de Fuenlabrada. Arte precolombino de la colección de Salinas de la Piedra, reunida a lo largo de varias décadas por su propietario Juan E. Salinas Lyon.
Sin duda un preciado tesoro, no sólo por el valor y la belleza de las piezas, sino también porque hablamos de la colección privada más relevante de arte precolombino en Chile, y una de las más importantes a nivel mundial, que contiene el legado de muchísimas culturas, desde el misterioso Chavín (la más antigua entre las altas culturas de América), hasta la cultura maya e inca.
Muestra que estará en el Centro de Arte Tomás y Valiente de Fuenlabrada hasta el próximo 2 de septiembre. Así que si quieren ver un preciado tesoro, acudan a la Sala A de este centro, antes de esa fecha claro, ya que después viajará a otros países como Francia, Italia y Portugal.